• Francia Violentas protestas en París tras un tiroteo que mató a tres activistas kurdos: «No nos protegen»

Autor del tiroteo que costó una vida tres acordes El sábado, fuentes de la investigación afirmaron que había confesado el viernes, en una céntrica calle de París, a los investigadores que había tenido la intención de matar a personas de este origen.

Esto fue informado a los policías durante su arresto, señalando que El móvil del crimen fue el «racismo».Según fuentes informadas por medios locales.

Según BFMTV, el sujeto preguntó a los agentes en el momento de la detención en una peluquería situada junto al Centro Cultural Kurdo donde cometió dos de los tres delitos: «¿A cuántos habéis matado?».

Los investigadores aún no han determinado el carácter terrorista del acto, que es lo que exigen los representantes de las asociaciones kurdas en Francia.

El Ministerio Público acusa al presunto agresor de homicidio, tentativa de homicidio, violencia y violación de la legislación sobre tenencia de armas, mientras que la Fiscalía Antiterrorista sigue de cerca el asunto para determinar si toma el caso.

Los representantes de la comunidad kurda fueron recibidos por el jefe de policía de París, Laurent Núñez, ya su salida, su portavoz, Ajit Polat, subrayó que el carácter terrorista de la acción «debe tenerse en cuenta».

«No hay duda sobre la naturaleza terrorista».

«Para nosotros, no hay duda sobre el carácter político y terrorista de estos asesinatos, y pedimos revisar su clasificación», dijo.

La indignación de esta comunidad se reveló anoche, cuando Las cosas fueron arrojadas a la policía. El mobiliario urbano en el área alrededor de la escena del tiroteo resultó dañado.

Se manifestaron este sábado en la Plaza de la República para mostrar su impotencia ante las amenazas que pesan sobre sus hombros.

Con las banderas del PKK y otras con el rostro de su líder, Abdullah Ocalan, cientos de manifestantes mostraron su enfado por la situación.

El tiroteo tuvo lugar el viernes, pocos días después del décimo aniversario del asesinato a sangre fría de tres militantes kurdos en otro centro turco ubicado en el mismo barrio, justo debajo de la última escena del crimen.

Funcionarios kurdos en Francia consideran que París no hizo lo suficiente para esclarecer la implicación de Turquía en ese crimen, dejando al mismo tiempo sus sospechas de que Ankara también está detrás.