Un ataque de la Patrulla Fronteriza amenaza con causar caos en los aeropuertos británicos durante las vacaciones de Navidad. El gobierno británico desplegó cerca de 650 soldados en los aeropuertos y puertos de entrada del país mientras continuaban las huelgas hasta finales de año, que en un futuro próximo se traducirán en Largas colas en el control de pasaportes.
No obstante, la jornada comenzó sin excesivos problemas en Heathrow, con actividad ‘normal’ tanto en llegadas como en salidas. Las aerolíneas han advertido a los pasajeros de posibles retrasos, pero hasta la madrugada del viernes no hubo mayores problemas ni cancelaciones de vuelos.
«La hora pico de la mañana transcurrió bien con un flujo normal de pasajeros a través de los controles de inmigración», dijo un portavoz del aeropuerto de Londres. «Los militares están haciendo un buen servicio». Desde un primer momento, los pasajeros agradecieron la eficacia de los militares en las labores civiles.
Esta es la segunda vez en la última semana que el gobierno ha tenido que desplegar un contingente de militares para hacer frente a la ola de huelgas que sacude al país. Exigir un aumento de sueldo.
El pasado miércoles, unos 750 militares se pusieron al volante de ambulancias durante un paro de conductores y paramédicos que provocó importantes trastornos en los servicios de urgencias hospitalarios, que también se han visto afectados esta semana por paros convocados por enfermeros.
Los sindicatos también llamaron Huelgas en la oficina de correos y en los ferrocarriles En plena cuenta atrás para la Navidad. Ante el caos de las últimas semanas en las estaciones de Londres, la mayoría de los británicos han optado por viajar en coche. Las salidas desde Londres, Manchester y otras grandes ciudades experimentaron una congestión masiva con alrededor de ocho millones de pasajeros en las rutas.
En el peor de los casos, los aeropuertos están cerrados
Se estima que hasta 9.000 vuelos y 1,8 millones de pasajeros podrían verse afectados mientras tanto por la huelga de la Guardia Fronteriza hasta el día de Año Nuevo, en los aeropuertos de Heathrow, Gatwick, Manchester, Cardiff, Glasgow y Birmingham. El jefe de operaciones de la Fuerza Fronteriza, Steve Dunn, advirtió que los pasajeros podrían esperar que la «turbulencia» continúe durante días e incluso podría provocar el cierre de aeropuertos «en el peor escenario posible».
Mark Sirotka, presidente del sindicato de Servicios Públicos y Comerciales (PCS), advirtió que la huelga de esta semana podría ser un presagio de huelgas que podrían durar hasta seis meses si continúa la lucha con el gobierno. El sindicato pide un aumento salarial del 10% acorde con la inflación y la abolición de recortes y despidos.
Gobierno Rishi Sunak Hasta ahora ha insistido en las demandas sindicales en la mayor ola de huelgas desde el «invierno del descontento» en 1978-79, citando la prioridad de combatir la inflación. Sin embargo, la opinión pública se puso del lado de las enfermeras y los conductores de ambulancias, a pesar de la desaprobación mayoritaria de las huelgas de trenes y guardias fronterizos.