- Italia Un turista murió y seis desaparecieron, incluido el británico Bill Gates, después de que un “súper” velero se hundiera.
- tecnología ¿Quién es Mike Lynch, el Bill Gates británico, que desapareció en un naufragio dos meses después de obtener su libertad?
Momentos de dolor y demostraciones heroicas vivieron durante el dramático hundimiento del yate de lujo bayesiano Que se hundió durante una tormenta inesperada Sicilia El lunes por la mañana temprano. El magnate tecnológico británico Mike Lynch y otras cinco personas siguen desaparecidas, mientras que la esposa de Lynch y otros 14 pasajeros sobrevivieron.
Entre las difíciles historias vividas durante la tragedia destaca una de las sobrevivientes, conocida como Charlotte Golonski, quien explicó a la agencia de noticias italiana ANSA que perdió momentáneamente a su hija de un año. SofíaEn el agua, pero luego logró llevarla sobre las olas hasta que se infló el bote salvavidas y fueron rescatados. El padre, identificado por la agencia de noticias italiana ANSA como James EmsleyÉl también sobrevivió.
«Perdí a mi hija en el mar durante dos segundos, luego rápidamente la abracé en la violencia de las olas», dijo Charlotte, que sostuvo a su pequeña «en pie con todas mis fuerzas, con los brazos extendidos para evitarlo». «Se ahogará.» Y añadió: «Todo estaba oscuro. En el agua no podía mantener los ojos abiertos. Grité pidiendo ayuda, pero lo único que podía oír a mi alrededor eran los gritos de los demás».
“Nos quedan once personas LondresDoce con Sofía. Todos los compañeros y colaboradores de nuestra empresa que se ocupan de la programación, la alta tecnología y el software. Invitados de nuestro presidente, una buena y extraordinaria persona. Estábamos todos a bordo del Bayesian, con 10 miembros de tripulación, incluido el capitán y la tripulación de la cocina. Gran barco grande al que viajamos. Las Islas Eolias. Finalmente, tuvimos que dar la vuelta. palermo Debido al mal tiempo…”, dijo Charlotte al periódico Corriere della Sera.
James Emsili también recuerda la zozobra que prevaleció aquella noche, que comenzó entre relámpagos, con el yate capitaneado por el neozelandés superviviente. James Calfieldse acercó a la costa, echó anclas, pero permaneció en el puerto. Quizás el error fue no buscar refugio a tiempo fuera de la presa, dentro del puerto: “Pero no vimos venir el torbellino y sólo pude disparar un misil para pedir ayuda”. y el comento Calfield.