Israel permite la entrada diaria de dos camiones de combustible en Gaza donde se agrava la crisis humanitaria

  • Directo Siga la última hora de la guerra en Gaza
  • Día 42 de la guerra La ONU confirma que Gaza ha quedado incomunicada

Tras 42 días de ofensiva masiva contra el grupo yihadista Hamas en Gaza, Israel acepta por primera vez la entrada diaria de combustible en la Franja, mientras aumentan los avisos locales e internacionales sobre la grave crisis humanitaria.

La decisión del gabinete israelí de gestión de la guerra, que contradice su promesa de no hacerlo sin la puesta en libertad de los secuestrados por Hamas el pasado 7 de octubre, coincide con el anuncio de la ONU de la suspensión de la entrega de ayuda humanitaria debido a la escasez de combustibles y los cortes de comunicación.

Agencias internacionales han lanzado un nuevo llamamiento para la entrada de combustible y un alto el fuego. El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU ha avisado que la población en la Franja de Gaza se enfrenta a la «posibilidad inmediata de morir de hambre» debido a la falta de alimentos.

«El gabinete de gestión de la guerra accedió a la petición especial de EEUU de suministrar dos camiones-cisterna para instalaciones de tratamiento de aguas residuales en la Franja de Gaza bajo la amenaza de colapso debido a la falta de electricidad y de capacidad para los sistemas de alcantarillado y agua gestionados por la ONU», declaró el consejero de seguridad nacional, Tsaji Hanegbi, que enfatizó la necesidad de evitar la propagación de epidemias.

La decisión fue tan criticada por algunos ministros que el jefe de Gobierno, Benjamín Netanyahu, intentó calmarles con la convocatoria de la reunión del gabinete más amplio para este sábado por la noche.

«La entrada de gasolina transmite debilidad, da oxígeno al enemigo y permite a Sinwar (líder de Hamas) sentarse cómodamente en un búnker con aire acondicionado, ver las noticias y seguir manipulando a la sociedad israelí y a las familias de los secuestrados», ha protestado el ministro de Finanzas, el ultranacionalista Bezalel Smotrish, que no forma parte del fórum más restringido tras la entrada de la formación centrista de Benny Gantz.

Los 60.000 litros diarios de fuel autorizados por Israel son vitales, pero es una gota en el mar. Hanegbi ha señalado en un mensaje interno que se trata de un 4% del combustible que entraba antes de la guerra, ante los que condicionan la entrada de combustible en Gaza a la vuelta a casa de los 239 rehenes.

En el gabinete israelí creen que sin combustible en Gaza, Israel no podrá seguir contando con el apoyo total estadounidense de la ofensiva y sin ésta no podrá acabar con Hamas ni aumentar la presión para que acepte liberar a más de 50 rehenes como dice en la negociación. Según el Canal 12, Israel comunicó que no habrá acuerdo si los niños y madres no son liberados.

Sinwar es consciente que el agravamiento de la crisis humanitaria beneficia los intereses de su brazo armado ya que eleva la presión internacional sobre Israel para un alto el fuego de varios días. Suficiente para congelar los planes de extender su operación terrestre al sur.

Según Hamas, al menos 12.000 palestinos han muerto en la ofensiva militar israelí iniciada tras su ataque que causó más de 1.200 muertos en el sur de Israel. Hanegbi hace un balance de la operación terrestre iniciada hace tres semanas: «21 días en los que pagamos un alto precio (52 soldados muertos) pero nosotros estamos ya en el corazón de la ciudad de Gaza atacando todos los lugares que queríamos atacar. Miles de terroristas murieron y altos mandos de los grupos terroristas nunca volverán a cometer atrocidades monstruosas».

«Hemos demostrado en Rantisi y Al Shifa cómo Hamas usa los hospitales para sus actividades terroristas», afirmó el oficial Elad Goren, encargado de la oficina para asuntos civiles en Gaza, señalando que «Hamas necesita el combustible para sus acciones en los túneles».

La polémica del hospital

Después de que el Ejército enseñara armas y un agujero de túnel en el complejo del Hospital Al Shifa con el que quería demostrar que el brazo armado de Hamas lo usaba como centro de mando, los islamistas lo negaron y rechazaron que escondieran rehenes en hospitales. Además, anunciaron la muerte de uno de ellos «debido a los ataques de pánico que sufrió como consecuencia de los repetidos bombardeos en torno a su lugar de detención».

El ministerio de Sanidad de Gaza controlado por Hamas definió la denuncia israelí como «falsedad». Su portavoz Ashraf al Qudra acusó a los soldados de convertir las instalaciones de Al Shifa en una «base militar para sus operaciones» tras entrar en varias zonas el pasado 15 de noviembre. Además, aseguró que «24 pacientes murieron en las últimas 48 horas por falta de electricidad».

El director del centro, Mohamed Abu Salmiya, dio la voz de alarma ante la ausencia de combustible y suministros médicos. «A veces, nos vemos obligados a dejar morir a los pacientes, no podemos realizarles ninguna operación quirúrgica, lo único que podemos hacer es darles algunos analgésicos para que las víctimas puedan morir en paz», dijo.

El primer ministro palestino junto a Borrell.
El primer ministro palestino junto a Borrell.Nasser NasserAP

«Las necesidades son inmensas», admitió el jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, en Ramala, donde se ha reunido con el presidente palestino, Abu Mazen. Tras recalcar el derecho de Israel a defenderse siguiendo el derecho internacional, Borrell señaló la importancia de contribuir al «esfuerzo gigante» de satisfacer las necesidades de los 2,2 millones de gazatíes a los que, indicó, la UE cuadruplica su asistencia a casi 100 millones de euros.