El ex canciller austriaco Sebastian Kurzha sido imputado este jueves del delito de falso testimonio por la Fiscalía Económica y Anticorrupción (WKStA) de Viena.Anticorrupción. El cargo se refiere a declaraciones hechas por el ex canciller de 36 años en una comisión de investigación creada por el Parlamento austriaco para investigar un escándalo de tráfico de influencias de la coalición que ése dirigía antes de dimitir en 2021. El rango de castigo por el delito imputado es de hasta tres años de cárcel.
En la comisión, creada en 2020 Kurz restó importancia a su papel en el nombramiento del jefe del holding estatal ÖBAG, Thomas Schmid. Sin embargo, basándose en los mensajes de chat, la fiscalía supone que el ex jefe de Gobierno estuvo muy implicado en la elección del personal.
Las primeras investigaciones se desencadenaron a raíz del llamado «caso Ibiza.» En un vídeo grabado en secreto en la isla, el entonces entonces líder del FPÖ, Heinz-Christian Strache, aparecía susceptible de corrupción. La entonces coalición del ÖVP y el FPÖ se rompió por este asunto.
En la búsqueda de pruebas de nepotismo y corrupción en la época en que Kurz estaba en el Gobierno, el teléfono móvil del ex jefe de ÖBAG Schmid jugó un papel central. Más de 300.000 chats -a menudo considerados incriminatorios por los fiscales- fueron un tesoro para los investigadores.
Schmid se ofreció como testigo clave en el asunto y en repetidas ocasiones incriminó a Kurz, con quien mantenía una estrecha relación.
El juicio contra Kurz comenzará el 18 de octubre, según anunció el portavoz del Tribunal Regional. Además de Kurz se sentarán en el banquillo su antiguo jefe de gabinete Bernhard Bonelli y la ex directora general de Casinos Austria, Bettina Glatz-Kremsner. El expediente consta de varias cajas, y la denuncia penal, de más de 100 páginas.
Kurz niega las acusaciones
Kurz siempre ha negado con vehemencia las acusaciones. «Son falsas y esperamos con impaciencia el momento en que la verdad salga finalmente a la luz y se demuestre ante los tribunales que esas alegaciones son infundadas», declaró Kurz cuando saltó el escándalo.
Kurz también podría enfrentarse a cargos en otro asunto relacionado con encuestas maquilladas y anuncios del Gobierno en periódicos sensacionalistas supuestamente pagados con dinero de los de los contribuyentes.
El antiguo líder del Partido Popular Austriaco (ÖVP), en su día esperanza para los conservadores de toda Europa, ha encabezado dos veces una coalición en Austria.
De 2017 a 2019, Kurz lideró una alianza del ÖVP y el ultraderechista Partido de la Libertad de Austria (FPÖ). De 2020 a 2021, fue jefe de Gobierno de una coalición del ÖVP y los Verdes.
Ante las acusaciones, Kurz dimitió inicialmente de sus cargos en otoño de 2021. En diciembre de ese mismo año anunció su salida completa de la política. Mientras tanto, se ha convertido en empresario y lobista.